Nosotras las niñas, de Xochil Vergara, es un documental que cuenta la historia de Yanina, una niña de 11 años, quien junto con su madre trabaja en espectáculos clown en parques y plazas de la ciudad de Panamá. Desde el humor y diversas dinámicas lúdicas, este trabajo abordará reflexiones sobre la niñez, la identidad de las mujeres y de los grupos indígenas y afrodescendientes que habitan en este país centroamericano.
Este filme es uno de los proyectos seleccionados en la convocatoria 2021 del Estímulo para la Creación Audiovisual en México y Centroamérica para comunidades indígenas y afrodescendientes 2021 (ECAMC), del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), institución de la Secretaría de Cultura federal.
“Este estímulo nos permite avanzar en la inclusión de las comunidades originarias y afrodescendientes a las distintas formas de creación audiovisual y cinematográfica, individual y colectiva, que durante mucho tiempo quedaron relegadas. Hoy, podemos conocer sus historias, sus sueños, su sentir”, comentó la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero.
En entrevista, Xochil Vergara comenta que esta película fusionará el documental y la ficción para debatir las narrativas que existen en los diferentes roles de las mujeres y lo femenino: la crianza, el crecimiento, el acompañamiento en la familia, en la educación y en otros ámbitos sociales. Su objetivo es explicar y desmontar el andamiaje de la identidad femenina y buscar modelos positivos en la figura de la madre o de liderazgos de mujeres que estimulan transformaciones profundas en la sociedad.
“Esta película será un viaje que empieza con el personaje del payaso, donde la gente ríe y, de repente, se da cuenta que se está descubriendo a sí misma; te colocas frente al espejo y empiezas a preguntarte sobre tu identidad, de dónde vienes, qué te mueve”, describe la entrevistada.
En esta búsqueda de modelos asertivos, la película contará con la participación de dos mujeres destacadas en la conformación y consolidación de grupos marginales panameños. La primera es Sara Omi, lideresa de las comunidades emberás, quien ha logrado avances en oportunidades para las mujeres indígenas.
“Ella representa esa parte de la identidad de la naturaleza, el origen del ser humano desde que somos tierra y estamos sembrados. Sara habla a partir de su cosmogonía, desde la mirada del universo emberá”, comenta la directora.
La segunda mujer destacada será Walkiria Chandler, diputada suplente de la Asamblea Nacional de Panamá, mujer afrodescendiente de 34 años que desde el ámbito legislativo busca defender y acompañar a las comunidades afrodescendientes del país, consolidar espacios para las mujeres en la política y crear leyes a favor de las mujeres panameñas.
De igual forma, el equipo de producción de Nosotras las niñas cuenta con mujeres jóvenes, dedicadas al quehacer audiovisual y originarias de distintas partes de Latinoamérica: la productora Génesis Bonilla, de Venezuela; la fotógrafa Elisa Barbosa Riva, de Uruguay, y la sonidista Eldrid Zavala, de Panamá, entre otras.
“Yo he querido mantener al equipo solo con chicas, porque el proceso que va a tener Yanina, quiero que pase por todas las del crew, que no sea solo estar haciendo la película, sino que todas tengamos nuestra historia, igual que la de la niña. Eso desde el primer momento era importante para mí y estoy segura que de esa manera el proyecto va a ganar más fuerza. Entonces es una decisión inamovible”, explica la creadora.
Nosotras las niñas tendrá, entre otras locaciones, la ciudad de Panamá y la comunidad indígena ipetí emberá. La intención es que la reflexión sobre la identidad de las mujeres panameñas abarque ámbitos urbanos y rurales, con énfasis importante en las mujeres que viven en comunidades.
Xochil Vergara es egresada de la especialidad de producción cinematográfica en la Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños, Cuba. Ha participado como directora y productora en diversos cortometrajes.
Actualmente Xochil Vergara y su proyecto, así como otros seleccionados en la convocatoria ECAMC, están en proceso de formación, lo que permitirá conformar las carpetas de producción y propuestas cinematográficas sólidas que puedan presentarse a las diversas convocatorias de apoyos al cine. Además, pasará a una etapa de evaluación y selección. Los proyectos que sean elegidos recibirán un estímulo para incentivar la producción o postproducción, así como para recibir orientación personalizada durante un año.
“Es un espacio que no se tenía, había que luchar mucho para encontrar algo así. Estoy muy agradecida y si queda el proyecto o no, ya creces, ya sales con una carpeta, con la posibilidad para aplicar a otro fondo y realizar tu película”, comenta.