*Rocío Mariel CR*
La cocina de México, además de ser muy extensa y riquísima por la variedad de alimentos y los nutrientes que ofrece, dentro de la sociedad mexicana cuenta con muchas supersticiones que pasan de generación en generación, las cuales ayudan a entender a su población y se relacionan con el día a día y su forma de vida.
Por ejemplo, muchas veces hemos escuchado a nuestras abuelitas, tías, mamás, incluso a nuestras primas decir, al momento de preparar un alimento como las tortillas: “Si la tortilla infla bien, significa que te vas a casar”, esto hace alusión a una habilidad que requiere de años de práctica, lo cual en las tradiciones populares se refiere a que la persona ya está lista, preparada y madura para caminar o esperar en el altar.
Para el mismo ejemplo de contraer un compromiso de esa magnitud con otra persona, hablar sobre el resultado de la consistencia del arroz cuando se cocina también es muy común usarlo para referirse al matrimonio o si la bebida como el chocolate es espumosa o no.
Otra superstición en dicho que es frecuente escuchar dentro de los hogares mexicanos es: “Si preparas tamales triste, quedarán crudos o salados”, lo que alude a que cuando los tamales están sobrepasados de sal o no se cocen bien, es porque quien los hizo, probablemente se encontraba bajo de ánimos y deprimido por alguna razón.
“La salsa sale picosa si estas enojado”, las personas la aplican cuando la persona que preparó las salsas que acompañan los guisos o platillos tienen demasiados chiles o picantes, con este dicho se refieren a que seguramente la persona que las guisó se encontraba de muy mal humor, esto es común escucharlo en cocinas económicas y restaurantes.
Entre otros ejemplos están: “Si tienes la mano o vibra pesada las claras de huevo no subirán”, cuando las mamás hablan sobre la actitud de quien trata de batir las claras está con mala disposición o de mal ánimo, simplemente no se encentrará su forma espumosa.
Y si de preparar mole o batir la mezcla para un pastel se trata, se dice que si bates los ingredientes del lado contrario al que giran las manecillas del reloj, el mole se corta o el pastel después de horneado no infla.