*Rocío Mariel CR*
El 2 de octubre de 1968 fue una fecha paradigmática en México, la lucha estudiantil marcó un antes y un después. En un país de autoritarismo, corrupción, represión, los estudiantes de la Ciudad de México alzaron la voz y fueron crudamente reprimidos por el Batallón Olimpia en la Plaza de las Tres Culturas, durante un mitin del Comité de Huelga.
Las consignas estudiantiles de ese año iniciaron desde julio, sus principales peticiones eran a favor de la democratización del país, de la autonomía universitaria y contra la violencia sistémica del Estado; al igual que en otras partes del mundo como Praga, Checoslovaquia, París, Berlín, en donde iniciaron movimientos estudiantiles y de jóvenes en contra de la Guerra en Vietnam, extendiéndose a demás consignas político-sociales.
La represión de Tlatelolco en 1968 no fue la única ni la última en México, décadas posteriores, la utilización del Ejército para reprimir a la oposición política y a la población civil continuó. Incluso, las demandas de entonces aún continúan vigente hasta nuestros días, donde impunemente se ha encarcelado, reprimido y amenazado a periodistas y reporteros por decir la verdad.
Por ejemplo, con el Halconazo del 10 de junio de 1971, donde se reprimió otro movimiento estudiantil en la Ciudad de México; el misterioso accidente de Genaro Vázquez en 1972, líder magisterial rural; el asesinato de Lucio Cabañas, otro líder magisterial y fundador del Partido de los Pobres; la desaparición de los 43 estudiantes en Ayotzinapa.
Algunos filmes realizados el tema son: Tlatelolco, verano del 68 (2013); Rojo Amanecer (1989); El Grito (1968). Algunos libros que abordan este tema son: La noche de Tlatelolco, de Elena Poniatowska; 68, de Paco Ignacio Taibo II; México 68 Juventud y revolución, de José Revueltas. En varias ciudades del país y algunas en Quintana Roo, se reportan movilizaciones y actividades para recordar esta fecha, porque el 2 de octubre no se olvida.