*Rocío Mariel CR*
Los ajolotes, animales endémicos de México, salamandras con la característica poco habitual de conservar sus rasgos larvales durante su vida adulta, son conmemoradas a nivel nacional todos los días 1 de febrero anualmente para hacer conciencia sobre la importancia que tiene el ajolote, tanto a nivel cultural como de especie.
Esta condición, que se conoce como neotenia, significa que conserva su aleta dorsal de renacuajo, la cual recorre casi la totalidad de su cuerpo y sus branquias externas, que sobresalen de la parte trasera de su ancha cabeza en forma de plumas.
En la mitología azteca esta especie simbolizaba el movimiento y la vida. Un dato curioso que nunca debes olvidar es que este tipo de salamandra solo existe en los 180 kilómetros de los canales de Xochimilco, en la Ciudad de México.
En 2018 se ingresó el decreto “1º de febrero Día Nacional del Ajolote Mexicano” en el Senado de la República, debido a la publicación del artículo “The axolotl genome and the evolution of key tissue formation regulators” en la revista Nature, en el que se descubrió que el ajolote mexicano tiene 32 mil millones de pares de bases de ADN, lo que lo convierte en el genoma más grande que ha sido secuenciado en la historia. Este día tiene el objetivo de difundir la importancia del ajolote en el ecosistema y cultura mexicana. En este día también se realizan exposiciones, charlas y talleres en el Axolotitlán, Museo Nacional del Ajolote.
Los ajolotes son llamativos y resaltan por sus grandes ojos, un semblante que aparenta sonrisa profunda y “eterna”, además de sus colores brillantes, el ajolote se ha convertido en una especie protegida, pues se encuentra en la Lista Roja de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza desde 2019.
Su relevancia cultural y biológica pone énfasis en el papel que juega la sociedad en su conjunto, en las actuales estrategias para la preservación de esta especie que está en peligro de extinción.
Algunos museos donde puedes encontrar ajolotes son: Axolotitlán: Museo Nacional del Ajolote es un proyecto que inició en 2017 con el objetivo de preservar y difundir información sobre la importancia y rescate del ajolote.
Santuario del Ajolote Planeta, Biodiversidad y Sociedad: Ubicado en la zona del lago de Xochimilco, este proyecto se creó para apoyar la preservación de especies endémicas en peligro de extinción de la zona de Xochimilco, tal como lo son los ajolotes.
Umbral Axochiatl: Con un espacio dentro de una chinampa adecuado como laboratorio para trabajar en la reproducción, mantenimiento y conservación del ajolote, Umbral Axochiatl ha logrado que haya desoves, crías, juveniles y actualmente ejemplares adultos en su espacio.
Centro de Investigaciones Biológicas y Acuícolas de Cuemanco (CIBAC): El cual pertenecía a un proyecto de la Alcaldía (antes delegación) Xochimilco, pero después le cedieron los derechos a la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Xoxhimilco para usar el espacio físico y dar continuidad a los trabajos de conservación de especies del lugar.
Mi amigo Axolote: A diferencia de los proyectos anteriores, Mi Amigo Axolote es un proyecto que surge en medio de la era digital. Tal cual lo explica en su página de Facebook, “nace por el amor y la fascinación hacia los axolotes endémicos de Mexico, creando diseños e ilustraciones para inmortalizar a estos bellos anfibios en diferentes objetos”.
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