La Ruta Encuentro con Sor Juana abarca los municipios de Amecameca, Ayapango, Ozumba, Tenango del Aire, Tepetlixpa y Tlalmanalco, ubicados en la zona de Los Volcanes. Estos municipios se destacan por su turismo religioso y poseen joyas arquitectónicas que conectan con el pasado, la fe y el origen.
La Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción,en Amecameca, forma parte de un conjunto monástico fundado por los dominicos en 1554. Este templo de estilo manierista, construido en el siglo XVI, destaca por su entrada de cantera rosa y es una magnífica muestra del arte virreinal.
En el interior del recinto, se resguarda la valiosa obra de Echave Orio, el Ángel de la Anunciación, junto con pinturas al fresco. En el atrio, se pueden apreciar una fuente de cantera y un reloj de sol de piedra.
En Ayapango, no puedes dejar de visitar la Parroquia de Santiago Apóstol. Este templo católico tiene forma de cruz latina y se encuentra junto a los restos de un convento. Su antigua portería, ahora convertida en la puerta de acceso a la casa cural, sigue en pie.
Su atrio arbolado está circundado por la clásica muralla almenada, muy característica de los templos cristianos de los siglos XVI y XVII en México.
A dos kilómetros al sur de Ayapango se encuentra el Convento Franciscano, un destacado ejemplo de la arquitectura colonial. Este edificio cuenta con elementos decorativos del arte sacro en su arco de entrada, que se conservan hasta el día de hoy.
En Ozumba, Pueblo con Encanto, se encuentra el Exconvento y Parroquia de la Inmaculada Concepción. Este conjunto franciscano del siglo XVI es una joya arquitectónica de estilo barroco. En su interior, se pueden apreciar retablos de diferentes estilos: barroco, churrigueresco y salomónico, que se conservan en excelentes condiciones.
La Parroquia de San Esteban Protomártir, en Tepetlixpa, es un conjunto arquitectónico construido por los dominicos en el siglo XVI. Destaca su planta en forma de cruz latina y su fachada principal. En el presbiterio, también pintaron un retablo pintado al temple por la misma orden.
Tiempo después, en el siglo XVII, los franciscanos construyeron la cúpula, el campanario, el coro y un retablo de madera con laminilla de oro y plata que cubre el retablo original pintado por los dominicos.
La edificación es un ícono religioso, cultural y social en Tepetlixpa, y desde 1979 es considerada Patrimonio Cultural del Estado de México por el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
En Tlalmanalco se aprecia el impresionante conjunto conventual franciscano dedicado a San Luis Obispo, cuyo templo luce imponente con el Iztaccíhuatl que se vislumbra a lo lejos.
Sin embargo, lo más valioso del conjunto conventual es la Capilla Abierta, una de las obras de arquitectura virreinal más admiradas del país.