El tallado de hueso y cuerno en el Estado de México es una práctica ancestral que data de la época colonial, se implementó para la elaboración de artículos utilitarios como botones, peinetas, aretes, abrecartas y artículos para la caza, entre otros.
En el Estado de México se cuenta con 79 maestras y maestros artesanos que se dedican a la elaboración de piezas talladas en hueso y cuerno, quienes están registrados en el Instituto de Investigación y Fomento de las Artesanías de la entidad (IIFAEM). Sus talleres se localizan en los municipios de San Antonio la Isla, Tianguistenco, Toluca, Tlalmanalco, Nezahualcóyotl y Chimalhuacán.
De acuerdo con Félix Mauro Arzate García y Margarita Graciana Morán Gonzaga, de San Antonio la Isla, el proceso de elaboración de las piezas de hueso inicia con la selección de la materia prima, posteriormente limpian el hueso remojándolo en agua caliente hasta hervir; esto permitirá que se ablande y de esta forma se pueda extraer los residuos para que quede totalmente limpio.
En el caso del cuerno, se selecciona dependiendo su forma, para posteriormente recortar y pulir la pieza con herramientas como seguetas y lijas manuales.
La destreza e imaginación de las y los creadores transforman el hueso y el cuerno en diferentes figuras decorativas o en piezas utilitarias como percheros y los tradicionales accesorios, aretes, collares, pulseras y más.
Cuando se trata del fémur de res, éste se corta por la mitad, se calienta para posteriormente aplanarlo a manera de que quede de un grosor uniforme.
En este proceso, las y los artesanos utilizan maquinaria como caladoras, sierras de arco de diferentes tamaños, seguetas, cuchillos y herramienta elaborada por ellos mismos, para realizar botones, llaveros, peinetas, prendedores o dijes, así como esculturas o piezas de mediano formato.
El IIFAEM invita a conocer este trabajo y adquirir estas artesanías a través de sus Tiendas de Artesanías Casart, y pone a su disposición la venta por Mercado Libre, Amazon y por la aplicación de WhatsApp al 722-148-6220.