Artesanos toluqueños se han preparado con más de seis meses de anticipación para celebrar el tradicional “Día de las Mulas”. Con más de 40 años de tradición, cada día de Corpus Christi, esperan a la comunidad a las afueras de la Catedral de Toluca.
Conmemoración que refuerza los lazos culturales y destaca la labor artesanal que se realiza en el municipio. Las figuras son elaboradas con unicel para formar la silueta, hojas de maíz y plátano para cubrir el cuerpo y cabeza, mientras que las patas son de madera.
Adornadas con guacales, trastes con sopa y tarros de barro, las mulas cuentan con detalles como petates, que recuerdan los lugares donde dormían los ancestros, sombreros de hoja de maíz y flores, símbolos de nuestra rica herencia cultural.
Esta es una oportunidad de recordar y honrar nuestras tradiciones, además de apoyar a quienes con su trabajo las mantienen; juntos, podemos preservar nuestro legado cultural y asegurar que estas expresiones permanezcan como un pilar de la identidad toluqueña.
El Día de las Mulas es un ejemplo de sincretismo cultural, donde se mezclaron las tradiciones prehispánicas con las católicas. Con la llegada de los españoles, esta tradición se fusionó con la celebración del Corpus Christi, dando lugar al Día de las Mulas.
Sobre por qué es el Día de las Mulas hay dos versiones: la leyenda católica que dice que una mula se arrodilló ante la Sagrada Eucaristía que le presentó San Antonio de Padua, hecho que logró que un infiel se convirtiera al catolicismo.
Otra versión alude a las mulas como los animales clave para transportar todos los elementos que se ofrendaban en la fiesta y que formaban parte de la peregrinación.