*Melchor García*
La capital mexiquense tiene una tradición cultural y gastronómica peculiar entre la que destaca la rica historia de sus cafés.
Estos lugares que han sido testigos de innumerables conversaciones, amores y momentos inolvidables, son referencia para la ciudad y, en estás vacaciones, algunas opciones están disponibles para ser visitadas.
Los primeros cafés en Toluca surgieron a principios del siglo XX, cuando la ciudad comenzaba a modernizarse. Estos establecimientos, con sus mesas de madera y sus aromas envolventes, se convirtieron rápidamente en puntos de encuentro para la sociedad toluqueña.
El restaurante y café Biarritz, por ejemplo, uno de los puntos de encuentro de escritores, poetas y periodistas desde los años 70, hoy en día continúa ofreciendo servicio para toda la familia y ha modernizado paulatinamente su estilo.
El café Dalí que en un principio en la década de los 90 ofertó café de grano para degustar con escritores y poetas de la época.
Con el paso del tiempo, los cafés toluqueños han evolucionado, adaptándose a los gustos y necesidades de las nuevas generaciones. Es el caso de Aquelarre, la primera cafetería feminista de la ciudad, un espacio seguro y acogedor para todas.
“Aquelarre es más que un café, es un movimiento”, afirma Rebeca, su fundadora. “Queremos crear un espacio donde las mujeres se sientan empoderadas y puedan compartir sus experiencias”.
Sin embargo, la esencia de las cafeterías sigue siendo la misma: un espacio para compartir, para conversar, para disfrutar de un buen café.
“Un café no es solo una bebida, es un momento”, afirma Carlos, un joven barista de la cafetería Huitzin, situada en la calle Benito Juárez. “Cada taza lleva consigo una historia, un sentimiento”.
En los últimos años, Toluca ha experimentado una verdadera revolución cafetera. Han surgido nuevas cafeterías que ofrecen una amplia variedad de cafés de especialidad, tostados de origen y métodos de preparación.
“Los jóvenes estamos buscando experiencias nuevas y los cafés de especialidad nos ofrecen eso”, comenta Ana, una estudiante universitaria que visitó el concepto café Scorsese.
Los cafés toluqueños combinan a la perfección la tradición con las tendencias más actuales, estos lugares son conocidos por su ambiente acogedor y familiar. Desde los clásicos cafés de olla hasta los más sofisticados espressos, hay algo para todos los gustos.