Parangueo, sus cráteres, misticismo y tradición

*Eréndira Zavala C*

Uno de los lugares misteriosos y menos conocidos de nuestro país, se encuentra cerca de Valle de Santiago en el estado de Guanajuato: el cráter de Parangueo, pieza de un conjunto volcánico conocido como “Las Siete Luminarias“. Un lugar lleno de leyendas, simbolismos y tradiciones que reflejan la cosmovisión de las comunidades que lo rodean.

El nombre de Parangueo proviene del purépecha y se dice que puede significar “lugar de agua en el interior” o “sitio de muchas aguas”. Parangueo es un maar (cráter volcánico creado por explosiones freáticas) y es parte de los siete cráteres volcánicos extintos, formados hace millones de años; antiguamente, este cráter contenía una laguna que se secó por la sobreexplotación y la evaporación.

Hoy día, el fondo del cráter es un desierto blanco, cubierto por una capa de sal que da la sensación de un paisaje lunar y en mapas aéreos parece un ojo blanco en medio de un horizonte árido. Para llegar a él, debe pasarse por un oscuro túnel de piedra, excavado a mano, de más de 400 metros que conecta el poblado de Valle de Santiago con el lecho del lago.

Algunas personas creen que los cráteres son puntos energéticos o “portales” hacia otras dimensiones, y hay quienes aseguran haber tenido experiencias espirituales en el lugar; además de que existen relatos acerca de luces misteriosas, apariciones y sensaciones extrañas. En ciertas fechas, especialmente en el equinoccio de primavera, algunos grupos de personas se reúnen para realizar rituales de conexión con la naturaleza, sanación espiritual y meditación.

A pesar de su riqueza natural y cultural, Parangueo es un sitio poco protegido, la sequía del cráter recuerda el impacto ambiental causado por la intervención humana, pero también una oportunidad para repensar la relación entre tradición, naturaleza y sustentabilidad.

Los pobladores de Valle de Santiago se han organizado para promover un turismo responsable y recuperar el valor de Parangueo, mediante visitas guiadas, talleres, narración de leyendas y actividades culturales con el objetivo de compartir el conocimiento tradicional con las nuevas generaciones.

Parangueo es un espacio de memoria, tradición y espiritualidad, su conservación es cuidar su geografía y honrar creencias y relatos antiguos. Su visita es una experiencia que invita a reflexionar sobre el tiempo, la tierra y la identidad mexicana.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *