*Alejandra C.L.*

Si buscas un lugar diferente para salir este fin de semana, toma en cuenta Calimaya, un pueblo con rica cultura y tradición que ofrece diversos atractivos turísticos como la Torre del Reloj, pero también con estructuras que por siglos se han mantenido en el municipio, dando cuenta del paso del tiempo, como la Parroquia dedicada a San Pedro y San Pablo Apóstoles, que albergó uno de los conventos franciscanos más grandes que se construyeron en la región.
Esta iglesia, con detalles barrocos, se edificó en el siglo XVI, entre los años 1529 y 1594, cuando los franciscanos llegaron al Valle de Toluca para comenzar con la evangelización de los matlazincas, nahuas y otomíes que habitaban en la región, una vez que se consolidó la conquista de México y empezó el periodo colonial.
De acuerdo con los documentos históricos, la fundación de este convento se realizó con el fin de unificar a los pueblos de Tepemaxalco y Calimaya, a donde podían asistir los indígenas para su educación religiosa, además de albergar a los franciscanos que los evangelizaban. Anexo al convento, se edificaron varias capillas: abiertas para los indígenas, capillas posas en las esquinas del atrio y la capilla dedicada a la tercera orden de los franciscanos.
También se construyó un bautisterio con pila bautismal labrada en piedra. Con los años, debido a las reformas y diversas modificaciones que se realizaron en la iglesia, la arquitectura original se perdió, siendo ocupada por los detalles barrocos del siglo XVII y principios del siglo XVIII, sin embargo, para quien visite la parroquia aún puede ver algunas estructuras del siglo XVI como el ábside con su altar, donde se encuentra un Cristo en la Cruz, elaborado con bagazo de caña, de hechura indígena.
Otras obras artísticas de carácter religioso que se encuentran en la parroquia son pinturas, estofado y esculturas de santos, en la cual sobresale la pintura “La Virgen de la luz”, del pintor Miguel Cabrera. Cabe destacar que esta capilla ha sido declarada Monumento Histórico por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) por combinar elementos europeos e indígenas en su hechura. Así que no olvides visitar esta iglesia que además alberga otros tesoros, como una carroza que el pueblo atribuye haber pertenecido a los condes Santiago-Calimaya, quienes