*Redacción*
Anualmente, cada 8 de marzo es el Día Internacional de la Mujer y aunque pareciera ser un día para celebrar, ésta fecha guarda sucesos irreparables que dieron lugar a su conmemoración.
Un día como hoy y desde 1975, se evoca a otro luctuoso año en que el intento por mejoras laborales y el pedido de equidad salarial y de derechos, miles de mujeres perdieron la batalla. Previo a que la ONU institucionalizara esta conmemoración, el 8 de marzo era recordado como el día de la mujer trabajadora, pues su concepción y espíritu de origen fue de carácter sindicalista.
Aunque no hay un antecedente específico que amerite su existencia, el día es un reflejo a las luchas obreras que durante décadas llevaron adelante miles de obreras en todo el mundo.
Especialistas del tema aseguran que las primeras teorías sobre el origen de la fecha se remontan al año 1857 cuando miles de trabajadoras de una fábrica textil de la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, salieron a protestar bajo el lema “Pan y rosas”, pero una vez más perdieron la batalla. En la tragedia, 120 mujeres perdieron la vida.
La fecha se conmemoró con mítines a los que acudieron más de un millón de personas, quienes exigían que las mujeres tuvieran derecho al trabajo, a ocupar cargos públicos y a la formación profeisonal.
Concretamente el 8 de marzo de 1977, la Asamblea General Organización de las Naciones Unidas (ONU) decidió que era necesario reivindicar a la totalidad de las mujeres y a todos sus derechos, por eso, estableció el “8 de marzo” como el Día Internacional de la Mujer.