*Eréndira Zavala C*
Cómo es bien sabido, en distintas culturas la muerte es muy importante, tanto que ha generado un oficio mortuorio extraño, el de las plañideras, mujeres que cobran por llorar en los funerales. Esta palabra proviene de plañir, que significa “gemir y llorar, sollozando o clamando”.
Este oficio se originó en el antiguo Egipto pues existía un tabú acerca de que los hombres no debían llorar ni mostrar tristeza ya que les correspondía demostrar fortaleza para guiar a la familia en momentos de dolor; por ello cuando alguien fallecía se contrataban mujeres para que lloraran e hicieran público el lamento y dolor familiar, incluso la importancia del difunto era medida por el número de plañideras que asistían.
La manera en que manifestaban el dolor era variada, desde lamentos con gritos y golpes en el pecho, hasta echarse tierra sobre la cara, cabeza y cuerpo y jalarse los cabellos con fuerza. Vestían una túnica de color gris-azulado, el cabello suelto y los brazos en alto como signo de sufrimiento.
Las plañideras también aparecen con los griegos, mujeres cubiertas con velos negros. En la civilización romana, se cubrían la cara con un velo y llevaban un recipiente (lacrimatorio) donde recogían las lágrimas derramadas que luego era colocado en el féretro con la idea de limpiar el alma del difunto.
Desde el siglo III, en China, existen menciones de plañideras, aunque con la Revolución Cultural fueron denigradas, considerándose de mal gusto. No obstante, actualmente son artistas profesionales contratados quienes llevan a cabo algunos rituales relacionados con la muerte. Otro ejemplo se encuentra en Gran Bretaña, donde se podía contratar una compañía llamada “Rent a Mourner”, para que actores se presentaran a los funerales como primos lejanos del fallecido, la empresa cerró en 2019 y ahora la firma “Envisage” se encarga de este negocio.
En México, se creía que los difuntos eran acompañados por el llanto en su viaje al Mictlán; a diferencia de otras culturas, las plañideras mexicanas -también llamadas lloronas o chillonas– buscaban profundizar en el dolor de los afectados con lamentos y rezos, además de reforzar la reputación del difunto, vestidas con ropa y velos negros. En la actualidad, el oficio de plañidera profesional está en extinción, pero ha evolucionado en eventos como el Concurso Nacional de Plañideras en San Juan del Río, Querétaro, en la festividad de Día de Muertos, donde se lamentan por la muerte de algún famoso.
Tradiciones y costumbres curiosas encontradas por el mundo y que han tenido o tienen aún alguna relevancia en la cultura mexicana.
Conoce más de Tradición es Cultura: