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La Semana Santa es la celebración religiosa anual que permite la conmemoración de lo hecho por Jesús en vida, desde su predicción, detención, su muerte, hasta su resurrección, hoy se le conoce como la Pasión de Cristo, hecho histórico que ha sido retratado por diversas religiones en el mundo de diferente manera.
En estas fechas hablar de “pasión” significa “acción de padecer”, por antonomasia sería la de Jesús.
Semana Santa es celebrada en la sexta y última semana de Cuaresma, es un periodo de ocho días, que comienza desde el Domingo de Ramos, día en que Jesús llegó a Jerusalén, donde las personas lo recibieron con palmas en forma de tributó, hasta el Domingo de Resurrección, la fecha de celebración en la actualidad es variable (entre marzo y abril).
Su origen data del siglo II, pero fue hasta 300 años después que se dio un día concreto para la conmemoración de la Última Cena de Jesús con sus apóstoles, momento histórico donde anunció que uno de ellos le traicionaría.
Derivado de ello, nació para el cristianismo el “Triduo Pascual”, es decir, los momentos de la Pasión, la Muerte y la Resurrección de Jesucristo, (Pasión de Cristo en la actualidad), sus pilares más importantes de esta religión son, Jehová, Jesús y La Virgen María, sus días centrales son Jueves Santo, Viernes Santo, Sábado Santo y Domingo de Resurrección.
En Jueves Santo se celebra la Última Cena, la institución de la eucaristía, la orden sacerdotal y el lavado de pies; el Viernes Santo se conmemora la crucifixión de Jesús, la soledad de María (madre de Jesús), para salvar al hombre del pecado y darle la vida eterna ; el Sábado Santo es la Vigila de Pascua y el Domingo es la Resurrección, conocido también como Domingo de Pascua.
Es por ellos que la Semana Santa es un periodo para los creyentes, en dedicarse a la oración y reflexión sobre lo hecho por Jesús durante el Triduo Pascual, con su infinita misericordia, quien decidió tomar el lugar de los hombres y recibir el castigo para liberar a la humanidad del pecado.
Hoy en día en el mundo lo conmemora con diversos actos, como procesiones, la escenificación del drama de la muerte y Pasión de Cristo, entre otros, donde los participantes se someten a duras cargas como símbolo de su autosacrificio y, en el día Viernes Santo, los fieles deben de guardar ayuno y abstenerse de comer carne.
En México una de las representaciones más grandes e importantes de la Pasión de Cristo, ocurre en calles de la alcaldía Iztapalapa en la Ciudad de México, desde el año de 1843, la cual comprende escenificaciones teatrales libres de pasajes de la vida de Jesús de Nazaret entre el Domingo de Ramos y la Pascua, teniendo como culmen el Viacrucis con la crucifixión de Cristo en la cima del Monte Gólgota (representado por el Cerro de la Estrella).
Los actores son nativos de la alcaldía y anualmente convoca a un estimando de dos millones de personas, este año, debido a la pandemia por COVID-19, la procesión se realiza bajo estrictas medidas de seguridad, es transmitida en vivo por la televisión y redes sociales.
Desde el 16 de marzo de 2010, esta representación fue declarada Patrimonio Cultural Intangible de la Ciudad de México, y desde el 2011 busca ser reconocida por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.