*Redacción*
Lugares que se encuentran en el borde territorial de la Ciudad de México y otros más inmersos dentro de la urbanización, la capital del país tiene varios de estos a los que pueden acudir las personas para hacer un gran picnic con familiares, amigos o en pareja.
Y para pasarla bien no se necesita de lujos o sitios extravagantes, por eso los lugares de distracción o recreación que mencionaremos a continuación son adecuados donde puedes ir y tener un gran picnic:
Parque Bicentenario:
Se ubica en la alcaldía Miguel Hidalgo, y si bien es un parque joven con apenas nueve años de vida, cuenta con 55 hectáreas llenas de áreas verdes, aunque también posee áreas deportivas, un lago artificial y hasta siete ecosistemas.
Casa del Laberinto del Ajusco:
Este famoso laberinto lo encuentras en la carretera Picacho-Ajusco, sobre el kilómetro 15, Ampliación San Miguel Ajusco, Tlalpan; ahí, verás hasta dos hectáreas, donde una de sus atracciones es una enigmática casa que tiene un misterioso jardín en forma de laberinto.
Parque La Mexicana:
Este sitio lo localizas en la alcaldía Cuajimalpa; hereda su nombre por una de las dos minas de arena que había originalmente en el terreno. Ante la falta de espacios públicos de convivencia, áreas verdes y servicios públicos, los colonos de la zona plantean al gobierno la construcción de un parque metropolitano. Una década de gestión vecinal, logró un acuerdo con el gobierno. En el diseño del parque destaca un andador principal y la creación de diversas zonas dedicadas a actividades particulares: jardines infantiles, jardín de adultos, skatepark, jardín canino, la terraza gourmet, los lagos y el anfiteatro.
Los Dinamos:
El Parque Nacional Los Dinamos es un Área Natural Protegida con una extensión de 2 mil 429 hectáreas de bosque. Hay una red de senderos ecoturísticos de 26 kilómetros donde se pueden practicar diversas actividades como bicicleta, escalada, tirolesa, rappel, campismo, pesca de truchas o montar a caballo. Su nombre se debe a que ahí se localizan instalaciones de antiguas fábricas textiles, donde se generaba energía eléctrica a partir del agua.
Desierto de los Leones:
Se ubica al sur de la ciudad, y aunque el nombre evoque a un desierto y a los reyes de la selva, lo que el visitante encontrará ahí es un exconvento del siglo XVII, que perteneciera a los Carmelitas Descalzos, además de una prominente vegetación, un pequeño río y una serie de prestadores de servicios para realizar actividades recreativas enfocadas a los niños, eventos culturales, espacios para ejercitarse y lugares de comida popular mexicana.
